20/8/12

AUXILIOOOO!...¿QUIÉN SE ROBÓ MIS CHINOOOS?!!...

¡T-E-R-R-I-B-L-E!...
Cada vez peor: más incontrolable, menos sano, menos chino: Un híbrido extraño que no queda bien de ninguna forma y no es ni la pálida sombra de esa sinfonía de rueditas que en su día fue nuestra cabeza... Y frente al espejo una pobre 'ex-orgullosa china' preguntándose cómo sucedió tal tragedia y si va a acabar con la cabellera de Albert Einstein o el 'Profesor Memelovsky'...

Esta entrada la dedico a mis amistades -que últimamente me he topado varias- con la misma pregunta: ¡¿Quién se robó mis chinos?!.. ¿Las hormonas, los tintes, los descuidos?... Pero sobre todo ¿Cómo hacer para recuperarlos?...

Bueno... La verdad es que el pelo cambia. Dicen que aproximadamente en ciclos de 5 a 7 años y ciertamente muchas veces coincidiendo con los cambios hormonales y la edad. Mi hijo se volvió chino (chino, chino, chino como su madre) hasta los 14!... Y cuántas veces no vemos mujeres que de plano 'cambiaron de pelo' después del embarazo, pasando de chinas a lacias o viceversa... Así que no es tan raro que de pronto el pelo nos cambie, pero lo que sí es muy desagradable es que ese cambio venga con una cabellera cuyo aspecto ni nos gusta ni sabemos cómo controlar.

Después de descartar o equilibrar -aún con la ayuda del médico- las causas fisiológicas que puedan estar provocando esos cambios y quizá una caída extrema de pelo, hay darse a una auténtica labor de rescate del cabello. No ya para tener 'los mismos chinos de siempre', pues puede que por las razones arriba mencionadas eso no sea posible, pero no importa! Lo importante es que el pelo -independientemente de si es MUY chino o medio chino o sólo ondulado- se vea MUY bien. Y el pelo solamente se ve muy bien cuando está sano y acondicionado. 

Ese es el reto y la meta: Recuperar la buena salud y el buen aspecto del pelo. Cuántas vueltas den los rizos sobre sí mismos ya es lo de menos, porque el 'nuevo look' será un 'buen look' si el pelo está en óptimas condiciones... Por eso la tarea de 'rescate' se resume en una palabra: ¡Acondicionar!
Mucha gente, en su pánico de verse ese híbrido crespo en la cabeza, se pone de plano a recogerse el pelo o alaciarse diario, sin considerar que eso no sólo no ayuda sino empeora la situación!...
Más bien es momento en que todas las medidas estén orientadas a recuperar su aspecto saludable y se podrían resumir en 4 pasos: Menos shampoo, más acondicionador, mucho tratamiento y poca agresión.

1. Menos shampoo; porque el shampoo reseca mucho el pelo y lo último que quiere una 'china en problemas' es tener el pelo MÁS seco!... Espaciar las lavadas y si se quiere o necesita volver a 'acomodar' el pelo, entonces mojarlo pero usar solamente acondicionador, no shampoo (ver entradas anteriores del blog)
2. Más acondicionador: Lo dicho... 'Limpiar' el pelo sin shampoo y sólo con acondicionador dándole masaje a la cabeza. No usar productos '2 en 1' y nunca dejar de usar acondicionador CADA vez que se moja o lava el pelo.
3. Mucho tratamiento: Ya sea de esos que vienen en bote y se dejan en el pelo de uno a tres minutos al bañarse (son acondicionadores 'normales' pero más concentrados...) o ampolletas -si se tiene el tiempo y la paciencia para usarlas- o las nuevas cremas de 'acondicionador sin enjuague' que incluso se usan por la noche; y por último, los tratamientos de acondicionamiento profesionales que se aplican en el salón y se dejan a veces por media hora, etc... Eso ya depende del gusto, tiempo, grado de 'gravedad' del caso y presupuesto; pero como sea, hay que darse a fondo a la tarea de acondicionar el pelo!
4. Poca agresión: En esta auténtica campaña de rescate, un factor importante será evitar cualquier 'estrés' o agresión extra sobre el pelo... Llámese uso de la secadora, tenazas, cepillos de púas, chongos o colas de caballo restiradas, tintes muy agresivos, cloro de alberca diario, exceso de sol, alaciado insistente, pinzas o broches de metal... En fin: Todos sabemos lo que agrede al pelo; y si se trata de 'consentirlo' y recuperar su salud, tenemos que poner especial énfasis en evitar maltratarlo...

Dicho esto, solo queda agregar los principios (que por supuesto toooooda china debe saber....) de peinar el pelo mojado -o en la regadera- solamente con un peine de dientes anchos; evitar la toalla y los 'turbantes' y recurrir en su lugar a una toalla de microfibra o una camiseta de algodón vieja sólo para retirar el exceso de agua; usar el producto para peinar de nuestra preferencia (si nuestros chinos no están luciendo bien, quizá es tiempo de cambiar de productos y experimentar con otra cosa; de todos modos siempre es bueno variar la rutina para el pelo y probar cosas diferentes...) y dejarse el pelo en paz sin tocar, jalar, revolver, etc etc hasta que se seque (al menos por una hora)

Si después de todas estas medidas, al cabo digamos de un mes el pelo no mejora notoriamente ¡me doy!... Pero eso no va a suceder. Lo más probable es que mejore MUCHO y que encontremos la manera de acomodar (y acomodarnos) al nuevo look que nuestra propia naturaleza nos presenta... Es más; quizá sea el buen momento de cambiar y replantear el estilo, el peinado, el corte, el largo (que por cierto cuando el pelo ya está demasiado maltratado es muy aconsejable...) y quién sabe... A lo mejor descubrimos una nueva cabellera china que nos gusta tanto o más que la que teníamos antes!!! : )
¡Ánimo chinas desanimadas!... ¡Al rescate de nuestras rizadas cabelleras!...